Málaga - Madrid

Hace ya más de cinco años, tal vez seis hice la maleta por última vez en Málaga para volver a mi casa. En aquel momento lo vi muy claro y muy fácil y aún hoy recuerdo las lágrimas de algunos de mis compañeros/as cuando crucé la puerta de salida arrastrando esa pequeña maleta, me iba de trabajo, de la ciudad y de vida.

Muchas veces me acuerdo de aquella etapa de mi vida que no supe aprovechar como debía de haberlo hecho. La verdad es que en ocasiones echo de menos a toda la gente que dejé atrás y me gustaría verles más a menudo. Ya no voy a visitarles como antes, ni siquiera hablamos por teléfono con la frecuencia que lo hacíamos, las distancias se van haciendo cada vez más largas, pero no se pierden.

Ayer mismo me llamó mi amigo Felipe para contarme una gran noticia... él y Maribel van a ser padres!!! y joder que alegría me da, en serio. Es algo especial... Ambos eran compañeros de trabajo, se conocieron delante de mis narices y ahora... jejeje que cabrón, siempre pensé que Felipe necesitaba un tutorial para estas cosas... ingeniero matemático... poooor favoooor.... jajaja (siempre me meto con él por estas cosas). ENHORABUENA SINVERGUENZASSSSS!!!!

Es una gran noticia, como, afortunadamente, son todas las que recibo cuando tengo una llamada de Málaga. Es curioso como se han ido casando, teniendo niños etc etc. Por cierto ahora que lo pienso, en mi empresa más que una oficina parecía un busco-pareja.
Que yo recuerde... había, entre las que se formaron durante y las de después, por lo menos 5 parejas entre compañeros.... no, yo me libré o como se diga. Yo es que de estas cosas siempre me libro... Soy un coleccionista de amistades no de amantes... me llena más, que le vamos a hacer.

Para ser sinceros, por aquel entonces tenía mi cabeza en Madrid. Nunca he pensado que tomase una decisión equivocada, creo que lo volvería a hacer tantas veces como lo sintiese. Lo único de lo que me arrepiento es de no haber disfrutado de una ciudad que lo merecía y de una gente que lo valía todo.

Estaba en una empresa con mis buenos y malos momentos, vivía en un hotel donde me consideraban de la familia, tenía una habitación de 40 metros cuadrados, me alimentaban más de lo que necesitaba, ni siquiera pagaba el teléfono, la gasolina o el café de media mañana, tenía un buen sueldo y un audi de empresa al que no importaba abollar aparcando. Mucha gente pensaría que lo tenía todo, pero mi cabeza estaba en Madrid. Muchos idiotas hubieran aprovechado la ocasión para pegarse la gran vida, la gran juerga... las condiciones eran inmejorables... pero mi cabeza estaba en Madrid.

Así que depués de cuatrocientos viajes Málaga-Madrid, Madrid-Málaga decidí que lo dejaba todo por que si, por que mi cabeza estaba en Madrid y mi corazón con ella.

Pasaron tres meses y lo dejamos... y yo buscando trabajo... a veces el destino tiene un humor que te descojonas... pero no me arrepiento de nada, solo de no haber aprovechado a la gente que allí encontré, la ciudad, la luz... esa luz maravillosa y del mar, ese mar que muchas veces no miraba aunque viviese a 50 metros, y no lo miraba porque mi cabeza estaba en Madrid....


Besos y abrazos.


Sorry, es que cuando me pongo a recordar... es que me pongo muy tonto.

P.D. Aún guardo la carta que me enviasteis con los resultados de nuestra liga semanal de bolos. Joder como os echo de menos.